El proceso de recuperación de escritura pública en El Salvador se refiere al procedimiento legal que se sigue cuando una persona pierde o daña la escritura pública de un acto jurídico, como una compraventa de un inmueble, un contrato de donación o una sucesión, y necesita obtener una copia certificada del documento perdido o deteriorado. La escritura pública es un documento esencial que tiene validez legal, por lo que es importante contar con una copia de ella en caso de pérdida.
El proceso de recuperación de la escritura pública generalmente incluye los siguientes pasos:
- Solicitud ante el notario: La persona que ha perdido la escritura pública debe acudir al notario que redactó y firmó el documento. El notario puede tener una copia de la escritura, ya que este es obligado a conservar una copia de todos los actos notariales que realiza.
- Verificación en el registro: Si el notario no tiene la escritura original o si el documento se perdió antes de ser entregado al notario, se puede consultar el Registro de la Propiedad para verificar si la escritura ha sido inscrita y, en su caso, obtener una copia certificada de la misma. La inscripción en el registro es un paso importante para garantizar la validez del acto jurídico en el ámbito público.
- Solicitud de copia certificada: Si la escritura pública está registrada, se puede solicitar una copia certificada del registro en el Registro de la Propiedad o en el archivo donde se guarda el acta original. Esta copia tendrá el mismo valor legal que la escritura original.
- Pago de tarifas: Dependiendo del trámite realizado, es posible que se deban pagar algunas tarifas por la emisión de una copia certificada o por la consulta en el registro.
- Recuperación del documento: Una vez completado el proceso y verificado el documento, el solicitante puede obtener una copia oficial que sirve para validar el acto legal que se haya realizado, como una compra de propiedad o un testamento.
Este proceso es importante para garantizar la seguridad jurídica de las transacciones y actos que se hayan registrado en la escritura pública, permitiendo que el documento sea accesible incluso si se pierde o deteriora la copia original.